



Veredas de Buenos Aires
De pibes la llamamos la vedera
y a ella le gustó que la quisiéramos.
En su lomo sufrido dibujamos tantas rayuelas.
Después, ya más compadres, taconeando,
dimos vueltas manzana con la barra,
silbando fuerte para que la rubia
del almacén saliera a la ventana.
A mi me tocó un día irme muy lejos
pero no me olvidé de las vederas.
Aquí o allá las siento en los tamangos
como la fiel caricia de mi tierra.
Les dejo estos bocetos con técnica suelta,por no decir a la que me importa.Coloreados con las acuarelas digitales del Painter x y algún toque de Photoshop cs4.Los dibujos a lápiz hechos con portaminas 2mm 2b.